¿Qué tipo de inteligencia necesita un emprendedor?

por landi

En verano circulan alrededor de playas y piletas, Sudoku, crucigramas, cuestionarios, acertijos, y otros ejercicios para entrenar y activar la inteligencia. ¿Cuánto le sirven al emprendedor? ¿Qué tipo de inteligencia se necesita desarrollar para llevar adelante con éxito un proyecto?

Los expertos han abandonado la idea de la que la inteligencia sea una sola y casi inmutable, para volcarse hacia la teoría de las inteligencias múltiples, un conjunto de habilidades que tienen una base genética, pero que pueden entrenarse y mejorarse.

• La receta para un emprendedor hoy debe combinar un poco de cada una de las siguientes "inteligencias" descriptas por los especialistas:
• Inteligencia abstracta. La más usualmente medida con el CI (coeficiente intelectual), señala la capacidad de una persona para la abstracción, el pensamiento lógico formal y la conceptualización. Si bien se han hecho muchas mediciones, y se sabe que algunos emprendedores brillantes brillan también en el tipo de tests utilizados para medirla, muchos otros no están en los números más altos y sin embargo llevan con éxito una variedad de negocios, basados en otras capacidades, a veces con mayor impacto. La cuota imprescindible debe permitir incorporar un lenguaje de negocios, manejar números, hacer planes, evaluar información (un poco de ejercicios de inteligencia "clásica" nunca vienen mal)

Inteligencia emocional. El concepto de una inteligencia intrapersonal que nos permite conocer nuestras emociones y gestionarlas en nuestro beneficio, fue difundido por Daniel Goleman, en su best-seller "La inteligencia emocional", de 1985. Un emprendedor debe estar preparado para entender y activar su motivación, navegar la incertidumbre y superar las frustraciones, entre otras habilidades puramente "emocionales" (lecturas de psicología y autoayuda no están mal como disparador para conocerse mejor)

Inteligencia social. Inicialmente asociado a la inteligencia emocional, tanto el mismo Goleman como Karl Albrecht, escribieron en los ´90 sobre la inteligencia social, entendida como la capacidad de relacionarse con otras personas. Atraer y volcar a su favor a socios, inversores, proveedores y empleados, es un requisito clave para cualquier emprendedor de hoy. A socializar y armar redes de contactos! (cara a cara, o visitá Facebook o Linkedin)

Inteligencia práctica. En el día a día, cuentan las decisiones bien tomadas, el sentido común, la solución de problemas, la convivencia con la ambigüedad y la complejidad sin caer en la parálisis, el avance por el camino de la vida aplicando lo mejor de nosotros. Parece simple, pero también requiere entrenamiento y voluntad.

Inteligencia estética. La belleza y la armonía también entran en el campo de la inteligencia. Indispensable un alto desarrollo si un emprendimiento entra en el campo de la moda, el diseño o el arte, pero a no olvidar en la papelería, vidriera, marca o presentación de cualquier otro negocio. No hace falta que sea trabajoso entrenarse: buenos libros, buena música, buen cine...

Emprendedores, a aprovechar el verano para entrenar sus múltiples inteligencias!