Enfocarse sólo en los negocios resulta limitante, aburrido, solitario y desapasionado. Siempre me ha gustado tener al arte cerquita, fiel compañera de recorrido de la vida. Son muchas las lecciones que brinda para ser emprendedores y hacedores más vitales, creativos y responsables. Comparto con ustedes dos excelentes creaciones de las que fui espectadora esta semana:
TEATRO - "Acassuso", en Andamio 90. Escrita y dirigida por Rafael Spregelburd.
Bertolt Brecht sostenía que el teatro debía producir un efecto en el espectador, transformarlo, hacerlo pensar. Se oponía a lo que llamaba "teatro culinario", es decir, aquel que producía sólo sensaciones. "Acassuso" es una obra brechtiana. El espectador es invitado a presenciar un relato de sucesos pasados, en la decrépita sala de profesores de la escuelita 78 de Merlo. Las maestras se confiesan "elegidas por la profesión" en lugar de al revés. La educación se define por "ejes" y "cupos", léxico que erosiona el sentido del aprendizaje, y reduce la tarea de las maestras a defender su metro cuadrado de existencia. La obra incorpora a su guión un hecho real, el robo del Banco Río, aquel de los túneles pre-cavados y la escapatoria en gomones, y reproduce en las maestras la misma idolatración de los ladrones que el hecho delictivo produjo en la sociedad argentina. Como un espejo en el cual nos miramos y reflexionamos sobre nuestra mezquindad, cobardía e ignorancia. Modificar la imagen que devuelve el espejo está en manos de todos nosotros.
CINE - La cámara oscura, co-producción franco-argentina, dirigida por María Victoria Menis, sobre guión de la argentina, Angélica Gorosdicher.
Gertrudis es la hija fea de una pareja de inmigrantes rusos que se instala en una colonia judía de la provincia de Entre Ríos a fin de siglo XIX. Su vida es condicionada por la visión prefabricada de la belleza de las personas a su alrededor. Va por la vida, obediente y callada, aceptando sin chistar una oferta matrimonial maquiavélica, y pariendo hijos para abastecer la hacienda de su marido. Su mundo interior, sin embargo, y su visión del mundo, pertenecen a una mente estética superior (aquí la película brilla, con magnífica dirección de arte y una bellísima animación de Rocambole). El rol en que ha sido encajonada Getrudis impide que ella se despliegue en toda su esencia... hasta que llega al pueblo un fotógrafo surrealista francés. La validación de su visión, la comprensión de otro ser humano, produce en ella una transformación irreversible. Como dice Menis en esta entrevista en Clarín: "'¿Te quedás toda tu vida con esa etiqueta, o conseguís, a través de la mirada de otro o la ayuda que te puede dar otro, empezar a correrte de ese rol? Porque esa etiqueta te automargina, te vuelve rígido y de pronto vos mismo te convertís en alguien que ya es así. La película rompe con eso y dice quizás si estás un poco atento, si estás un poco abierto de cualquier lugar te pueden tirar una soguita".
En mi opinión, "Acassuso" es más efectiva que un seminario de Responsabilidad Social Empresaria (RSE), y "La cámara oscura" un alimento superior para nuestro espíritu emprendedor que los casos de éxito empresario que nos encargamos de reproducir en los medios.
2 comentarios:
Es la primera vez que entro a su Blog, bueno hace unos dias, y he leido una gran parte de lo que tienen publicado (Gracias Vacaciones), y me ha gustado mucho la mentalidad y el contenido que manejan, lo terminaré de leer y les dejaré los comentarios pertienentes :D.
Saludos!
gracias vorguees, y que sigas disfrutando de tus vacaciones! ;)
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